En la Casa Sede de la ACAA en Cárdenas los cursos de superación, en un inicio dirigidos solo a los artesanos afiliados al gremio para su sistema evaluativo, han sido un impacto social en la ciudad por la decisión de la directiva de extenderlos a todos los interesados en diferentes materias. A petición nuestra, por la solicitud de la población y el interés marcado por la artesanía, el artesano artista Alexander Rodríguez Castellanos, impartió un taller de manualidades textiles que, como bien dijera él en sus palabras del catálogo “…fue un espacio que recibió con beneplácito la idea de aunar a inquietantes y creativas personas, para generar obras, que por su belleza estética y utilidad devienen artículos demandados en cualquier espacio vital del ser humano”. Dicha muestra fue dedicada al 35 aniversario de la fundación de la ACAA en Cuba, un homenaje digno a la membrecía que reúne a artistas de la artesanía que con su ingenio y oficio nos han ofrecido obras que acompañan nuestra vida desde un llavero hasta una escultura. Nuestros artesanos en el país, han tenido la ardua tarea de embellecer ciudades, de trabajar muchas veces por amor al arte, pero firmes en su decisión de hacer crecer su espíritu desde sus perspectivas que pueden o no ser aceptadas por muchos. El 7 de julio decidimos homenajear a estos grandes que un día comenzaron con un sueño, el mal tiempo estuvo en contra, pero dos días después pudimos al fin cumplir con ese aniversario: ¡Felicidades a todos los que tienen a su haber el difícil y bello arte de crear!

El programa del día fue extenso,  Mauricio González Artiles presidente de la Agrupación Cárdenas, celebró la II reunión de artesanos para felicitarlos personalmente y facilitar  el compartir juntos de la muestra que hace alusión a lo que manos atrevidas y talentosas hacen en pos de la artesanía cubana. La exhibición del trabajo final del curso de manualidades textiles, permanecerá hasta el día 7 de agosto en la galería “Olga Vallejo” de nuestra institución.

Y como era un día de fiesta para los creadores, la risa no podía faltarles.

Jardiel González con su espectáculo humorístico “Deja que coma el punto” les dio el toque final para que pudieran sentirse, como se merecen, en casa.

Redacción: Bárbara S. David Ballesteros